3. SN Espinal

1. Médula espinal

La médula espinal es la principal vía de comunicación nerviosa entre el encéfalo y el resto del cuerpo.  Tiene forma de cordón, y comienza en parte inferior del tronco de encéfalo y termina en la cintura, más concretamente en el cono medular. Está formada por un conjunto de fibras y células nerviosas que comunican al cerebro con el resto del cuerpo.

Al tener una consistencia gelatinosa, las vértebras forman un canal a lo largo de la columna por donde pasa la médula para estar protegida.  

En la médula podemos distinguir la sustancia gris, formada por células nerviosas; y la sustancia blanca, que rodea la sustancia gris y está formada por fibras nerviosas. Estas son conocidas como los tractos espinales y proporcionan vías de conducción bidireccionales hacia (tractos ascendentes) y desde (tractos descendentes) el encéfalo. Los tractos son organizaciones funcionales en las que todos los axones que componen cada uno de ellos desempeñan una función general. 

La médula permite que las órdenes del cerebro lleguen hasta los músculos para que nos podamos mover y transmite cualquier sensación hasta el cerebro. 

“La información circula en los dos sentidos, desde el cuerpo hacia el cerebro y desde el cerebro hacia el cuerpo. Además, los impulsos nerviosos no se mezclan unos con otros”. (M. Bea, 2017). 

Las fibras que conducen el dolor van todas agrupadas, formando haces o cordones en la médula, igual que hacen las fibras que conducen el tacto o el roce o las órdenes de movimiento que bajan desde el cerebro. 

Por tanto la médula transporta información en ambos sentidos, pero cada tipo de información u orden viaja por su carril específico.

La médula también es la encargada de producir por circuitos nerviosos los movimientos reflejos, que son movimientos muy rápidos e inconscientes que sirven para protegernos de algún peligro y de esta forma ayudan a prevenir lesiones.

La médula también trabaja para mantener el funcionamiento adecuado de nuestros órganos internos, gracias a la producción de los reflejos de tipo visceral.

La médula espinal, en el interior de cada vértebra, se organiza funcionando como un “mini-cerebro” de ese segmento. 

Los segmentos del cuerpo humano están dispuestos en parches, dermatomas, que son el área del cuerpo inervada por fibras nerviosas aferentes y eferentes de una sola raíz de la médula espinal; cada uno consta de un nervio sensorial o aferente, que envía información de la piel, músculos y articulaciones a su segmento de médula espinal; y un nervio motor o eferente que controla los movimientos de los músculos en ese segmento del cuerpo. 

La médula espinal se rige por la Ley de Bell y Magandie, por la cual las fibras ventrales de la médula son las que transmiten la información de la médula hasta los músculos, es decir, tienen función motora o eferente. Mientras que las fibras dorsales son las que transmiten información desde el cuerpo hasta la médula,  función sensorial o aferente. 

Por lo tanto, la sustancia gris está formada principalmente por cuerpos celulares, y la sustancia blanca se organiza en tractos dorsales (con función sensitiva) y tractos ventrales (con función motora). 

La médula sigue un control ipsilateral, es decir, el lado izquierdo de la médula controla el lado izquierdo del cuerpo y el derecho, el lado derecho del cuerpo.

2. Nervios craneales

Los nervios espinales podrían considerarse los cables eléctricos que salen de la médula y la comunican con el resto del cuerpo, conducen impulsos entre la médula espinal y las partes del cuerpo no inervadas por pares craneales. Son 31 pares de nervios que están conectados a la médula espinal de acuerdo con el siguiente orden anatómico descendente: ocho pares se insertan en los segmentos cervicales, 12 en los torácicos, cinco en los lumbares, cinco en los sacros y uno en el segmento coccígeo. Los nervios espinales contienen al igual que todos los nervios espinales fibras sensitivas y motoras y cada par de nervios da sensibilidad y movimiento a una parte del cuerpo.

La enfermedad o lesión que impide la conducción por un nervio espinal provoca la pérdida de sensibilidad y de movimiento en la zona inervada por este. 

Los nervios espinales se diferencian por una letra y un número por ejemplo C1 indica el par de nervios espinales conectados al primer segmento de la parte cervical de la médula espinal y T6 indican los nervios conectados al sexto segmento de la porción torácica de la médula espinal.

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